TARDES
LLENAS DE DULZURA
Con el mar como testigo
voy caminando en la tarde,
llevo a mi lado un amigo
sin hacer ningún alarde.
Alicante de esperanzas
desbordadas de cariño,
es una tierra de danzas
que se sienten desde niño.
Voces del Mediterráneo
que dejan sus vibraciones,
sin ser sonido foráneo
Alicante da emociones.
Tardes llenas de dulzura
hacen bella La Explanada,
entre brisas de cultura
Alicante es admirada.
Las brisas dejan candores
entre miradas altivas,
Alicante y sus valores
marcan las fechas festivas.
Sombras de viejas palmeras
en Las Ramblas bulliciosas,
olores de primaveras
con los brillos
de las rosas.
En las tardes
levantinas
de la ciudad de
Alicante,
se notan brisas
marinas
sin ver el mar
arrogante.
Barcos que dejan
sus huellas
como si fueran
caminos,
reflejos de las
estrellas
entre los
brillos marinos.
Caminos que son
estelas
que se pierden mar adentro,
cuando despliegan las velas
el marino vive atento.
G X Cantalapiedra.
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