sábado, 30 de septiembre de 2017

LAS PROMESAS IMPOSIBLES.

LAS  PROMESAS  IMPOSIBLES
La vida nos va llevando
por mil rutas diferentes,
y a veces vamos pensando
que existen inconvenientes.

Soñamos flores erguidas
sobre tiestos encantados,
mientras las tardes perdidas
son caminos no logrados.

Las promesas imposibles
tienen los días contados,
queriendo ser invisibles
en los sueños mal llevados.

Promesas que no se cumplen
en los caminos marcados,
a veces otras discurren
por sendas de enamorados.

Pasiones que son promesas
de un tiempo viejo y pasado,
que pueden darnos sorpresas
aunque vivas marginado.

Hay promesas de testigos
que solo causan dolores,
la vida te da castigos
cuando se sueñan amores.

Las promesas del futuro
suelen buscar el olvido,
hablan del presente oscuro
y todo lo ven perdido.

Promesas de tiempos viejos
donde la muerte nos llama,
nadie quiere sus complejos
por mucho que llore el alma.

Cuando se rompen promesas
en las noches anheladas,
algunas bocas se besan
buscando sendas doradas.

    G X Cantalapiedra.

viernes, 29 de septiembre de 2017

LOS CIUDADANOS DEL MUNDO

LOS  CIUDADANOS  DEL  MUNDO
Los ciudadanos del mundo
que nos gustan las verdades,
no queremos el absurdo
de escuchar las falsedades.

Fanatismos rencorosos
que vienen hoy caminando,
nunca podrán ser dichosos
si llegan atropellando.

Ciudadanos de razones
en un mundo complicado,
hoy tememos las traiciones
del cacique mal formado.

Soledades de fronteras
que quisieran colocarnos,
donde se viven quimeras
de sufrir y molestarnos.

Fanáticos de sus normas
que las colocan a tragos,
a veces colocan comas
en los momentos amargos.

Nacionalismos sin tregua
en un mundo marginado,
que nadie suelte su lengua
sí no será condenado.

Las mentiras van volando
mientras se forman barreras,
a su paso van dejando
castigos en sus fronteras.

Los que soñamos caminos
sin conocer las quimeras,
sentimos los tristes signos
en las más crudas esperas.

Fanatismos regionales
que buscan nuevas mentiras,
en sus formas anormales
hacen de las leyes tiras.

    G X Cantalapiedra,

BARRIOS NUEVOS SIN RAÍCES

BARRIOS  NUEVOS  SIN  RAÍCES
Barrios nuevos sin raíces
que puedan marcar sus pasos,
hablan de las cicatrices
que suelen dar los fracasos.

Cuando pisó Sanchinarro
o quizá Monte Carmelo,
allí no queda ni un carro
ni tampoco un buen trapero.

Las Tablas son el futuro
de un Madrid que allí renace,
su pasado siempre oscuro
hoy contiene otro bagaje.

Ensanches que fueron tierras
de labradores airosos,
más hoy sus calles se encierran
en ver sus pisos dichosos.

Un Madrid sin tradiciones
ni costumbres regionales,
donde se ven sensaciones
que no parecen normales.

Es un Madrid sin leyendas
donde se ven los defectos,
ayer trigales y sendas
hoy calles de fondos rectos.

Este Madrid sin pasado
que quisiera ser moderno,
hoy parece complicado
al ver llegar el invierno.

Sin saber si hubo traperos
en tierras que fueron campos,
que ganaron sus dineros
conociendo desencantos.

Ese Madrid de futuro
con sus calles relajadas,
hoy ven su presente duro
y buscan sendas doradas.

    G X Cantalapiedra.

CALPE Y SU PEÑÓN DE IFACH

CALPE  Y  SU  PEÑÓN  DE  IFACH
El Mediterráneo baña
a sus piedras milenarias,
es digno lugar de España
con vistas extraordinarias.

Se divisa su colina
donde se frenan los vientos,
y corre la brisa fina
de muchos momentos tensos.

Trescientos treinta y dos metros
para subir a su cima,
entre riscos y arbolados
que suelen dar este clima.

Un kilometro de largo
tiene su base de piedra,
que nunca parece amargo
aunque se ve poca hiedra.

Peñón lleno de leyendas
en diferentes culturas,
yo pisé sus bellas sendas
sin conocer amarguras.

Precipicios peligrosos
que suelen causar desgracias,
más hay momentos dichosos
entre sueños de distancias.

Calpe tiene de testigo
esas piedras enmarcadas,
pero nunca ve castigo
el subir sus andanadas.

El Mediterráneo altivo
le da reflejo constante,
y Calpe encuentra el motivo
de ver su imagen brillante.

Entre brisas marineras
y paisajes delirantes,
el Peñón tiene barreras
con peligros acechantes.
    G X Cantalapiedra.
    Dedicada a mí amigo de la infancia

    Antonio Domínguez Camaño. Que allí descansa.

jueves, 28 de septiembre de 2017

EL VIERNES BAILANDO EN SADA

EL  VIERNES  BAILANDO  EN  SADA
Con zapatos elegantes
y mí traje bien cuidado,
pienso en los muchos instantes
de aquel baile entusiasmado.

Entre “Cultura y Desguace”,
la música va sonando,
sí la juventud renace
el cuerpo lo va notando.

En Sada con un buen ritmo
el baile sigue su curso,
y nadie piensa en abismo
cuando le sobra el recurso.

Entre sonrisas dulzonas
y corbatas anudadas,
hay bailes que te emocionan
en las tardes anheladas.

Sada sabe de valores
entre sonrisas cuidadas,
y a la vez surgen cantores
en sus noches encantadas.

Jubilados de Galicia
que viven con ilusiones,
en Sada tienen delicia
con las nuevas sensaciones.

Son corazones templados
que buscan nuevas leyendas,
jubilados encantados
que saben pisar sus sendas.

La tarde noche del viernes
las ilusiones se crecen,
entre bailes y vaivenes
muchos sueños prevalecen.

En Sada se hace camino
entre notas musicales,
no hace falta un adivino
sí son los bailes normales.

    G X Cantalapiedra.

EL OTOÑO TIENE MUERTE


EL  OTOÑO  TIENE  MUERTE
Vienen las brisas de otoño
que siempre dejan su muerte,
puede que llegue el retoño
dándole al campo aliciente.

Otoño de enfermerías
entre sombras penitentes,
existen malvados días
que está la muerte presente.

Álamos de las Riberas
sufridores del ambiente,
quizá sus hojas esperan
otro mundo más paciente.

Hospitales al completo
con sueños de sus pacientes,
en aquel lugar inquieto
sufres horas transcendentes.

Brisas del otoño triste
que no conocen razones,
en la vida se que existe
muchas raras sensaciones.

Las campanas repicando
que la muerte se aproxime,
el Campo Santo esperando
que algún muerte allí se arrime.

Es el otoño de muerte
que no conserva dulzura,
a veces parece inerte
pero contiene amargura.

Los sonidos de su viento
sobre los campos desiertos,
jamás pueden dar aliento
sí van llamando a sus muertos.

Otoño de sepulturas
con sus símbolos de muerte,
los otoños dan locuras
y nadie se siente ausente.
    G X Cantalapiedra.

     28 – 9 – 2017.

EL OTOÑO MADRILEÑO

EL  OTOÑO  MADRILEÑO
Cómo buscando cariño
el otoño va llegando,
tiene sonrisa de niño
que nos viene regalando.

El otoño madrileño
puede dejar alegría,
aunque se nota su empeño
de vivir en simpatía.

Parques que tienen leyendas
con sus hojas volanderas,
algunos conservan sendas
que alegran las primaveras.

Otoño en melancolía
sobre las hojas resecas,
brisa de la noche fría
que jamás marca sus metas.

Sombras del otoño erguido
sobre los parques pisados,
con el otoño han venido
ciertos fríos despistados.

Nostalgia de tiempos viejos
en este Madrid amado,
donde se rompen complejos
con el otoño esperado.

Las nieblas del Manzanares
quieren correr su Ribera,
ellas buscan los lugares
donde fría sea la espera.

Las nostalgias otoñales
vienen abriendo camino,
son las formas naturales
de conocer nuestro signo.

Brisas de otoño creciente
que no quisieran olvido,
a veces dan aliciente
sí la tarde sea perdido.

     G X Cantalapiedra.

miércoles, 27 de septiembre de 2017

LA SECA MÚSICOS Y PANADEROS

LA SECA  MUSICOS  Y  PANADEROS
La Seca cómo testigo
de otros tiempos ya pasados,
donde nunca fue castigo
buscar panes bien logrados.

Eran tiempos musicales
los que La Seca vivía,
fueron dos bandas normales
que su música lucía.

Panaderos con sus panes
de aquel trigo tan perfecto,
que alegraban los hogares
marcando su rumbo recto.

Entre notas musicales
de Victor y de Ruperto,
hubo bailes naturales
que siempre dieron aliento.

Panaderos a montones
que admiraron sus labores,
luego tuvieron razones
de inmigraciones y amores.

Las dos bandas de La Seca
dejaron huellas perennes,
sonando marcaron meta
entre gloriosos vaivenes.

Panes que fueron caricias
en las tardes campesinas,
que a la vez dieron delicias
en las mejores cocinas.

El templete de La Plaza
con sus notas musicales,
siempre tuvieron su baza
en los domingos normales.

Panaderos de leyendas
que dieron fama y templanza,
con músicos que en sus sendas
supieron dejar su danza.
    G X Cantalapiedra
     27 – 9 – 2017.


AQUELLA NOCHE DE ENERO QUE SE QUEMO EL AYUNTAMIENTO

AQUELLA  NOCHE DE ENERO,  QUE  SE  QUEMO  EL  AYUNTAMIENTO
Aquella noche de frío y lluvia, sobre las tres y cuarto de la madrugada, del día 3 de enero, de 1961, sentí la campana María, tocando muy deprisa, cómo cuando existía algún peligro inminente, desde mi habitación me dio la impresión, de algún percance grave, sin pensarlo demasiado enseguida me coloque la ropa de trabajo, y mi padre conmigo, salimos a la calle, y en la esquina de la calle del Pozo Bueno, con la calle Real , vimos el resplandor, que era muy grande, y escuchamos una voz fuerte gritando. “Vecinos se está quemando el Ayuntamiento”. Sin dudar ni un momento bajamos corriendo por la Calle Real, y al llegar a la plaza estaban sacando cubos de dentro del Ayuntamiento, para poder acarrear agua, a las bombas que acababan de sacar de dicho Ayuntamiento, para apagar el incendio, el tejado de la parte oeste, era un bloque ardiendo, y con las mangueras se impidió que el incendio se acercara a ese lado, era imposible apagarlo, las llamas se fueron acercando hacia la calle del Cristo. Y aunque a los bomberos de Valladolid, se les había llamado, tardaron en llegar bastantes horas, ya que al hacer su entrada en la plaza, el abucheo y silbidos fue fenomenal, al ser aproximadamente las siete de la mañana, a lo que ellos respondieron una vez en la parte del tejado, con lanzar el agua de sus mangueras hacia el público que estábamos en la Plaza ayudando a sofocar dicho incendio, algunos lasecanos al ver tan fastidiosa maniobra, se marcharon a sus casas, en aquella mañana que el agua se quedaba congelada por el frío, yo con mis amigos de aquella época, estuvimos moviendo una de las bombas de lanzar el agua, durante bastante tiempo, era un trabajo de fuerza, y la juventud respondía, el alcalde de entonces, Cesar Nieto, convoco a los vecinos a seguir trabajando todo el día, para poder ayudar a la limpieza de todos los locales. Un grupo de jóvenes cumpliendo sus ordenes, nos dedicamos a subir libros, sobre media mañana, a la casa de El Señor Teodoro Sanz, entonces de Don Antonino Sanz, y familia, allí subimos cantidad de libros, para que no desaparecieran, en aquel siniestro, donde nadie pidió explicaciones, de cómo sucedió, y cuál fueron las causas, La Seca en aquel momento estaba callada, y no respondía a ninguna catástrofe, ni las autoridades de entonces hicieron una valoración de las causas del incendio, nadie sabía nada, y el silencio era la mejor medicina. Para evitar que te señalaran con el dedo. Digamos que todos aquellos amigos míos, que trabajamos aquel día sin cobrar y sin descanso, hoy día me parece que no queda nadie en La Seca. Hubo personas que ese día se marcharon a trabajar en sus fincas, al no sentirse llamados por dicho alcalde, al que no quisieron hacer caso. Hoy se me vino a la memoria, toda aquella historia, con su frío, y menos mal que yo llevaba unas botas de goma, sí no hubiera acabado, con los pies chorreando agua. La televisión española, acudió casi a medio día, y filmo una de las bombas echando agua sobre maderos quemados, ya en la Plaza de España. Y también, la fachada de dicho Ayuntamiento. Fue una noche para recordarla, aún cuando voy a La Seca, se me viene a la memoria, aquel resplandor del fuego, y la gente tratando de ayudar en lo que podía, Seguro que muchas personas de mí edad y aún mayores, recordaran dicha noche trágica. Ya en aquel año, Las bodegas empezaron a sentir las inundaciones, que costaron muchas viviendas, y la emigración entonces forzosa, de algunos lasecanos, que intentamos abrirnos camino, en cualquier parte de España, eso sí, sin perder nuestra historia, y raíces. Todos episodios que vivió La Seca, en aquellos tristes años, no fueron demasiado explicados, y es más, creo que nadie pidió explicaciones, a veces las verdades son dolorosas, pero las heridas es mucho mejor curarlas, un abrazo a mis paisanos. G X Cantalapiedra.      

martes, 26 de septiembre de 2017

EL CAMPELLO HUELE A MAR

EL  CAMPELLO  HUELE  A  MAR
Brisas del Mediterráneo
sobre sus bellas laderas,
El Campello no es foráneo
y sueña con primaveras.

Olores de mar abierto
hacen grandes sus pasiones,
en un ambiente despierto
que se llena de razones.

Barcos que llegan deprisa
para amarrar en su puerto,
con olor que no se eclipsa
ni ven su presente incierto.

Nombres que tienen grabados
en sus rutas marineras,
El Campello ve logrados
ciertas sendas altaneras.

Olores que van dejando
pensamientos marineros,
y en sus playas van notando
amores aventureros.

El mar, la mar de El Campello
tiene de azul el semblante,
y  en su puerto ves el sello
del marinero arrogante.

El mar soltando bramidos
en sus tardes machaconas,
y hay noches que son temidos
cómo fuerzas fanfarronas.

El mar marcando coraje
en sus largas turbulencias,
de nada vale el paisaje
sí triunfan las emergencias.

El Campello de Alicante
sabe de mares y viento,
sin perder nunca el talante
que dan muchos sufrimientos.

    G X Cantalapiedra.

LASECANOS POR EL MUNDO

LASECANOS  POR  EL  MUNDO
Soñando con la fortuna
se marcharon en silencio,
dejando atrás esa cuna
y sin buscar el desprecio.

Lasecanos por el mundo
emigrantes de por vida,
no quieren ver el absurdo
de ver su ruta perdida.

Entre pasos silenciosos
trabajaron su destino,
a veces fueron dichosos
viendo florecer su signo.

En la Castilla Profunda
dejaron huellas marcadas,
allí donde el vino abunda
y son grandes las heladas.

No perdieron las raíces
de sus campos castellanos,
aunque algunas cicatrices
les hicieron más humanos.

Sentimientos que afloraron
por diferentes paisajes,
recuerdos que se guardaron
dentro de sus equipajes.

Lasecanos con nobleza
por donde quiera que fueron,
sin cometer la torpeza
de defender otros fueros.

Con el pensamiento erguido
y la frente levantada,
el lasecano ha sentido
tener su tierra encantada.

Raíces que son grabadas
en las mentes inmigrantes,
que aunque sufran sus andadas
alegran muchos instantes.

     G X Cantalapiedra.

OLAS DEL MEDITERRÁNEO

LAS  OLAS  DEL  MEDITERRÁNEO
Vienen y se marchan solas
en cualquier acantilado,
dicen que llegan las olas
con su sonido grabado.

Estas las olas marcando
este mundo desquiciado,
y las playas van notando
cómo se sufre el estrago.

Las playas pierden arena
en ese penoso trago,
viendo como causan pena
no puedes hacer halago.

El clima viene cambiando
con ciclones tenebrosos,
y a su paso va dejando
los destrozos horrorosos.

La Madre Naturaleza
se siente muy deprimida,
y lanza su fortaleza
sobre la tierra querida.

Olas del Mediterráneo
que presienten su deriva,
sin ver su rumbo foráneo
el desastre se motiva.

El clima viene marcando
muchas negras tentaciones,
y el peligro va llegando
en un mar de confusiones.

Las brisas dejan sus huellas
sobre los campos secados,
donde brillan las estrellas
entre arroyos mal tratados.

El Mediterráneo llora
entre tantas confusiones,
y el ecologista implora
al ver claras las lecciones.

    G X Cantalapiedra.

lunes, 25 de septiembre de 2017

ENTRE SOMBRAS MARGINADAS.

ENTRE  SOMBRAS  MARGINADAS
Inmigrantes sin fortuna
que soñaron con dinero,
quizá mirando a la Luna
en su mundo aventurero.

Buscando nuevos caminos
quisieron soñar despiertos,
más no fueron adivinos
y gastaron sus alientos.

No quieren vivir razones,
ni escuchar sus sentimientos,
contemplan las sensaciones
que ofrecen los sufrimientos.

Les hablaron de destinos
que suelen dejar los vientos,
más existen desatinos
en los duros pensamientos.

Palabras que son promesas
de muchos malos momentos,
que pueden causar sorpresas
entre muchos descontentos.

Seguir los pasos sin rumbo
sin negociar un concierto,
es caminar al absurdo
en un camino desierto.

Las promesas quedan rotas,
sin entender de lamentos,
mejor borrar las derrotas
que pueden darnos los cuentos.

Inmigrantes de otras tierras
con sus fuerzas y desvelos,
nunca fue buena la guerra
ni supo de los consuelos.

Los caciques son caciques
que dominaran al pueblo,
tus intereses a pique
cómo dice el refranero.

    G X Cantalapiedra.
MADRID  DESDE  LA  LEJANÍA
Sientes la ciudad despierta
a cualquiera hora del día,
Madrid quiere estar alerta
sin perder su sintonía.

Calles que guardan misterios
envueltos en fantasía,
momentos que son tan serios
que no permiten porfía.

Madrid mirando de lejos
suelta reflejos de vida,
ciudad grande sin complejos
ni sentirse deprimida.

Torres que miran al cielo
repletas de fantasía,
jardines que dan consuelo
con derroche de alegría.

Sombras que tienen marcadas
sus rutas de simpatía,
Madrid sabe de alboradas
con la luz del nuevo día.

Miras a Madrid de lejos
mientras contemplas su brisa,
que arrastra los tiempos viejos
sin ver que nada se eclipsa.

Laderas del Manzanares
entre cornisas de gloria,
Madrid cuidando lugares
que hacen guardar su memoria.

Madrid despierta pasiones
que hacen brillar las estrellas,
con vibrantes emociones
en todas sus tardes bellas.

Este ciudad castellana
rebosante de destinos,
me parece más humana
cuando siento alegres trinos.
    G X Cantalapiedra.