viernes, 31 de mayo de 2019
ERA LA NOCHE DEL TRES DE ENERO DE 1961.
ERA LA NOCHE DEL TRES DE ENERO
Aquella noche terrible
con los vientos repicando,
algo en La Seca visible
viendo lo que fue pasando.
Voces de angustia gritando
entre los buenos vecinos,
la Villa lo fue notando
al ver sus tristes destinos.
Sonido de la Campana
para llamar a la gente,
en aquella madrugada
era penoso el ambiente.
Ardiendo el Ayuntamiento
a las tres de la mañana,
con tan triste sentimiento
La Seca se despertaba.
Vientos que dejaron fríos
sus bajas temperaturas,
gentes con escalofríos
comentaban las locuras.
Noche mala de bomberos
cuando pisaron la Villa,
ellos fueron poco austeros
mojando a gente sencilla.
Sobre cenizas marcadas
La Seca perdiendo aliento,
eran sombras alargadas
existiendo el descontento.
La decadencia brillando
sobre mi querida Villa,
el pueblo vi lamentando
incluso a gente sencilla.
Las desgracias no van solas
me dijeron desde niño,
ellas son como las olas
no precisan de cariño.
G X Cantalapiedra.
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