CASI EN EL RÍO DUERO
La Cueva del Señor “Vilo”
era una pura leyenda,
más en el Duero perfilo
lo bonito de su senda.
En la soledad del monte
sin buscar más compañía,
la Cueva fue ese resorte
donde reino la armonía.
Cazador de lunas bellas
entre brisas otoñales,
tuvo las noches aquellas
los silencios naturales.
Sus pasos fueron misterios
por las orillas del Duero,
viviendo momentos serios
en su mundo aventurero.
Pasiones llenas de brisas
que formaron su destino,
el hombre no tuvo prisas
ni quiso cambiar su signo.
El Señor “Vilo” marcando
sus enormes soledades,
las costumbres fue abrazando
con las enormes verdades.
Cueva que sigue escondida
en la Ribera del Duero,
es una zona elegida
que te suena a romancero.
Pinos cerca de la Cueva,
que apenas tiene senderos,
los grillos cantan su pena
con sonidos pasajeros.
Una vez pise la Cueva
para conocer su empeño,
no la percibí tan nueva
ni tiene aspecto risueño.
G X Cantalapiedra.
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