CUANDO NOS HABLAN QUE HAY BRUJOS

CUANDO NOS HABLAN QUE HAY BRUJOS Entre muchos curanderos por las tierras levantinas, ves volar ciertos dineros entre piedras y colinas, Sombras que siguen perennes por diferentes caminos, algunas dando vaivenes para alegrar ciertos signos. Un sábado de mañana allí por Los Arenales, me hablaron de vida sana de mil formas naturales. Sin pedir un presupuesto ni comentar ciertos males, me vi sin estar dispuesto a entender cosas fatales. La salud era el destino de mi paso por la vida, me hablaron con hilar fino sin tener nunca una herida. Sin entender sus costumbres ni comentar soledades, me dijeron que las lumbres a veces siembran verdades. Hierbas que curan sin prisa pero que marcan edades, donde se divisa brisa y se ven las falsedades. Curanderos de mentiras entre vientos infernales, al vivir trazan sus tiras que siempre fueron mortales. Las esperanzas de vida se sueñan entre pesares, y cualquiera despedida es amargar los hogares. Brujos llenos de leyendas con sus causas invernales, caminos que son las sendas de los tropiezos normales. Abrazar la brujería por las tierras de Alicante, es conocer la agonía sin poder tomar calmante. Brujos que dejan sus huellas por los milagros contados, que sueñan con horas bellas en momentos degradados. Cuando las dudas se notan sobre caminos sentidos, muchas penas solo flotan para ver sueños vencidos. La brujería clamando para aliviar los dolores, a su paso va dejando muchos raros sinsabores. G X Cantalapiedra.