Y LA ENFERMERA LE AYUDO A NO SER PESIMISTA

Y LA ENFERMERA LE AYUDO A NO SER PESIMISTA Aquel hombre que terminaba de entrar en urgencias del hospital , llevaba con él la pena de no poder conocer a su nieto, que se encontraba en camino, ya que su hija se hallaba en estado de buena esperanza, y aun la faltaban algunos días para dar a luz a su hijo, que sería el nieto de este hombre que en aquel momento le llevaban, por aquellos largos pasillos del hospital, su camilla se dirigía hacia la UVI, sin darle tiempo a pensar y reconocer los pasillos y ascensores, por donde pasaba, el corazón del hombre no dejaba de sufrir alteraciones, y su mente pensante no le dejaba quedarse dormido, hasta que por fin llego a su destino, donde le colocaron ventosas con cables, y un montón de aparatos sanitarios de alta categoría, en aquel lugar se dio cuenta enseguida, que era un lugar constante de vigilancia intensiva, esto le ayudo un poco en su ánimo de poderse recuperar de aquel ataque al corazón, que le había tenido al borde de la muerte, sin el poder hacer nada por evitarlo. Pasado un rato de estar allí sin decirle nada los médicos, una enfermera muy amable le comento, esto suyo puede ser recuperable total, lo que tiene usted que hacer es no estar nervioso, olvidarse del tabaco y del alcohol, y si es posible de las mujeres, a no ser que sea su esposa o su hija, a lo que el hombre enfermo contesto, diciendo es mi hija la que me tiene nervioso, espera un niño en corto plazo, y quisiera conocerle estando vivo, a lo que la enfermera dialogando con él, le animo para que superara su grave crisis coronaria, que en aquel momento estaba en pleno desarrollo, de poder sufrir otra crisis y no aguantar su corazón. Parece ser que la enfermera, era una verdadera profesional del tema que trataba, y el hombre se dejo llevar por sus bonitas palabras, viendo como mejoraba día a día, y esperando poder salir de allí, antes de que naciera su nieto, todos los pronósticos que daban los análisis del hombre, eran fatales, según los entendidos su muerte era cuestión de tiempo, aunque la enfermera no pensaba lo mismo, y cada día dándole ánimos, le veía mucho más afectivo y más humano con ganas de salir adelante, aunque los resultados de la analítica seguían distinto camino, los médicos al comprobar dichos resultados, no entendían como el hombre se movía en su cama sin ningún problema, mientras la enfermera decía, esto es un milagro del futuro nieto, que tiene que conocer a su abuelo. Pasaron unos días más y su hija entro en la maternidad, y le comunicaron a su padre lo que pasaba, y sintió una alegría desbordante, al saber que su nieto era cuestión de horas lo que le quedaba para llegar a este mundo, su corazón empezó a regularse, sin tener ninguna taquicardia, ni bloqueo ninguno, el médico que le miró que se encontraba pasando revista a las camas de la UVI, no se pasaba a creer lo que estaba viendo, ya que aquel lugar era temido por todos los enfermos, el hombre quiso pedir el alta clínica, aunque le dijeron que era un poco temprano para mandarle a su casa, y entonces la enfermera le comento, mañana quedaré con su familia, para poder pasarle a su nieto, que vendrá a conocerle y darle el primer beso, que aunque tenemos prohibido, el paso de niños y bebes a la UVI, yo trataré de pasarle como sea, para que usted le dé el primer achuchón, cosa que así paso al día siguiente, cuando aquel hombre se levanto sin ningún problema, de aquella cama de la UVI, sin notar ninguna molestia ni síntomas de dolor, y notó la felicidad de su corazón, al tener a su nieto en brazos por primera vez, y sin tardar muchos días más, salió de aquel hospital, sin poderse explicar los médicos su curación, casi para ellos milagrosa. El infarto del que tuvo que ser ingresado en Urgencias, no quedo nada de sus daños, ni las partes del corazón dañadas le dejaron huellas, pensando la enfermera, que su nieto al venir al mundo, le había traído la salud de regalo. G X Cantalapiedra.