JESÚS DE NAZARET

JESÚS DE NAZARET Quiero saber las verdades que siendo niño buscaba, no me importa las edades del hombre que predicaba. Busque desde el nacimiento lo que la vida me daba, conociendo el sufrimiento que este mundo nos dejaba. Ese Jesús Nazareno que predicó las verdades, le mataron por ser bueno y no montar falsedades. Los romanos fueron dueños de un imperio que mandaba, terminando con empeños de todo el que le estorbaba. Jesús caminó sembrando la luz del entendimiento, y al prójimo le fue hablando con santo razonamiento. Los caminos de su vida les quisieron ir borrando, su palabra no es perdida y a veces se ve flotando. Las reglas del humanismo que le dieron tanta fama, son señas del cristianismo que el buen cristiano reclama. Aquel Jesús Nazareno que a las masas predicaba, para el poder no era bueno, por eso le condenaba. Toda su vida marcada predicando en su camino, fue su vida masacrada sin querer verle divino. Aquel Jesús Nazareno nacido como profeta, hablan del hombre sereno que tuvo su vida inquieta. Cambiaron sus argumentos con el paso de los años, aunque quedan los tormentos de aquellos terribles daños. Jesús marcó su destino entre gente pecadora, sin predicar ser divino ni su mente aduladora. Caminante de caminos que buscaba nuevo rumbo, el quiso dejar los signos de cómo se cambia el mundo. Palabras que son cambiadas con sus muchas falsedades, entre ilusiones borradas que siempre quieren verdades. Aquel Jesús nos dejaba los caminos bien trazados, y al morir nos enseñaba sus sermones recordados. Palabra de Jesucristo que siempre me suena hermosa, sus consejos y su instinto te harán la vida gozosa. G X Cantalapiedra.