LOS LAMENTOS DE LA VIDA

LOS LAMENTOS DE LA VIDA Esperando su regreso entre sombras de la noche, en su casa vive preso y el mismo se hace reproche. Cada noche en su silencio se pregunta sin respuesta, “seré tan bruto y tan necio de no distinguir de fiesta. Los lamentos de la vida le dejan descolocado, hubo una mujer querida que le dejo desbordado. Las pasiones y los besos les quiere llevar grabados, dice que no son suspensos de sus años encantados. Más los lamentos le cercan al recordar su pasado, y sus suspiros se acercan a tiempos de enamorado. No existe la marcha lenta cuando vives alocado, todo se vuelve tormenta en un mundo equivocado. Los lamentos ya no cuentan si la vida está gastada, ellos solos se alimentan de alguna frase soñada. Hay momentos en la vida que no sirven los lamentos, si la etapa está perdida solo quedan sufrimientos. G X Cantalapiedra.