SOLEDADES EN MADRID Y EN RESIDENCIAS DE ANCIANOS

SOLEDADES EN MADRID Y EN RESIDENCIAS DE ANCIANOS Solos viven en sus vidas muchas veces marginados, con ilusiones perdidas entre pasos delicados. Hablando de residencias donde viven los ancianos, existen intransigencias que pagan muchos humanos. No vale sentirse altivo ni querer ser educado, la vida te da el motivo de ser un desheredado. Ancianos en el silencio con el tiempo mal contado, aunque no exista el desprecio él se siente despreciado. Existen las soledades de muchos pobres ancianos, que suelen decir verdades mientras les tiemblan las manos. Soledades transparentes que hacen temblar al humano, que se vuelven indulgentes en algún sueño cercano. Soledades de la vida con pasos desorbitados, que quieren hacer herida en momentos prolongados. Vienen corriendo a su mente tiempos que fueron gastados, que quieren tener presente por ser amores pasados. La Soledad del olvido en un rincón apartado, no hay anciano protegido ni sueño que sea nombrado. Los días se van pasando con la soledad al paso, la memoria va aguantando al recordar su fracaso. La vida se va gastando entre las viejas tinieblas, los ancianos van notando lo malas que son las nieblas. Hay caminos en la Vida que dan soledad siniestra, no es una ruta elegida pero será siempre nuestra. Residencia de mayores entre sufridas esquelas, con personas y dolores que van buscando sus velas. Todo pasa y todo queda en este mundo de gritos, a veces la muerte enreda entre sus penosos mitos. La soledad más terrible es vivir sin compañía, me parece inadmisible que se pierda la alegría. Si la soledad te llama cuando se termina el día, es un sentir que reclama lo dura que es la agonía. Soledades sin retorno ni perfecta simpatía, no quieres ver el contorno de cualquiera noche fría. Cuando las fuerzas sucumben sin preguntar las razones, muchos ancianos descubren que mueren sus ilusiones. Abrazando la esperanza de resurgir en la vida, quisieran hacer balanza sin temer a la partida. Existen malos momentos para las mentes tranquilas, la vida tiene instrumentos que desde niño perfilas. Sin comentarios penosos las soledades aumentan, hay silencios horrorosos que a las gentes atormentan. G X Cantalapiedra.