ERAN LAS CLARAS DEL DÍA POR EL CAMINO DEL PUERTO.

ERAN LAS CLARAS DEL DÍA POR EL CAMINO DEL PUERTO Sin romper las ataduras de tradiciones pasadas, eran tiempos con locuras en condiciones forzadas. Por El Camino del Puerto entre viñas recordadas, brillaban como en desierto soluciones no pactadas. Eran las claras del día caminando hacia Las Planas, cuadrillas con armonía en aquellas viñas sanas. En La Poza de Los Lobos se fijaban las miradas, y llegando a Los Erizos en Macana se quedaban. El Balcón de La Lobera en el Duero se fijaba, aquella enorme ladera entre viñas se quedaba. Por El Camino del Puerto donde reina la esperanza, el aire suelta su aliento que parece alegre danza. El Duero sigue esperando con historias que te amarran, es algo que va brillando y que en la mente te agarran. No tengas miedo a la noche ni quieras trazar distancia, La Seca no tiene broche para anular la arrogancia. Ese Camino del Puerto donde el aire se remansa, hoy me parece un acierto que el transitar no te cansa G X Cantalapiedra.