BUSCABA ROSAS LOZANAS
Entre sueños maliciosos
buscaba rosas lozanas,
y en sus pasos temblorosos
encontró promesas vanas.
En el Madrid bullanguero
entre brisas enmarcadas,
soñaba el amor sincero
en las frías madrugadas.
Buscando flores y rosas
todas ellas muy lozanas,
espero tardes dichosas
que nunca le fueran vanas.
Aquel hombre aventurero
que no buscó la distancia,
tuvo el sueño pasajero
de vivir en la elegancia.
Madrid le daba cobijo
entre flores marginadas,
sin olvidar el prefijo
de las tardes encantadas.
Aquel joven rebuscaba
papeles de amigos nuevos,
y en su mente retumbaba
palabras que son venenos.
Entre las rosas lozanas
de su juventud marchosa,
fueron tristes las mañanas
sintiendo el mundo otra cosa.
El jardín le daba marcha
con sus mujeres hermosas,
y algunas veces le engancha
por sentir fiebres gozosas.
Aquellas rosas lozanas
se quedaron sin amores,
hicieron muchas mañanas
un canto a los ruiseñores.
G X Cantalapiedra.
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