LA MELANCOLÍA DEL RÍO UCERO
Ya se termina el verano
en estas tierras de Soria,
el otoño ayer profano
hoy refresca la memoria.
Álamos de la Ribera
con enebros y pinares,
sufrieron la larga espera
de sus secos manantiales.
El Ucero suspirando
esperaba ver la lluvia,
y su vega fue regando
entre tristeza y penumbra.
El Ucero temeroso
viendo su caudal menguado,
espero sin ser dichoso
este otoño marginado.
Campos viejos castellanos
sufridores de su clima,
caminos de montes llanos
que vieron seca su cima.
Murallas cómo testigos
de calores inhumanos,
que a veces fueron castigos
para los buenos hermanos.
Melancolía a raudales
envuelta sobre nostalgia,
son las formas naturales
que a esta tierra la da magia.
El Ucero va tranquilo,
su corriente no ha menguado,
en su discurrir perfilo
algún verso enamorado.
Los Puentes sobre el Ucero
se sienten más implicados,
el agua marcha hacia el Duero
sin ver signos complicados.
G X Cantalapiedra.
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