LOS DOMINGOS POR LA TARDE

LOS DOMINGOS POR LA TARDE Madrid parece tranquilo en sus calles de barriada, miro su ambiente y perfilo alguna tarde añorada. Están solas las aceras con su silencio de olvido, apenas se ven esperas en el lugar entendido. Madrid respira silencio en estas tardes complejas, hablan que existe el desprecio cuando se reclaman quejas. Circulando sin temores voy recorriendo las calles, quizá buscaré candores en luces con mil detalles. Madrid despide armonía con tanta calle desierta, el frío no es simpatía dejando su puerta abierta. Los barrios van respirando sus silencios y pasiones, aunque a veces van notando un montón de confusiones. Este Madrid bullanguero que nos trae la primavera, no es el del mes de febrero que deja sola la acera. Entre recuerdos guardados y costumbres anheladas, los lugares encantados ven las personas heladas. Madrid respira silencio en estas noches de invierno, donde el calor tiene precio en el sentido más tierno. G X Cantalapiedra. 1 – 2 - 2015