PIEDRAS QUE
ESTAN RESBALANDO
El
miedo de compañero
con
las piedras susurrando,
no
quiero mirar al cielo
a
la vez que voy temblando.
El
Ucero de testigo
esperando
aquel desmadre,
que
será cómo un castigo
en
cualquiera amarga tarde.
En
El Puente del Suicida
el
respeto se hace grande,
llevando
la frente erguida
el
miedo corre en la tarde.
Miras
las piedras airosas
que
quieren gritar altivas,
y
contemplas muchas losas
que
quieren seguir activas.
Piedras
que son tenebrosas
con
sus paredes quebradas,
aires
que buscan las rosas
en
sus curvas marginadas.
Las
piedras buscan motivos
para
dar la campanada,
con
terribles adjetivos
en
esa senda añorada.
El
yuyo marca sus miedos
en
las orillas del río,
aquí
no valen los credos
cuando
el viento llega frío.
Un
paisaje de misterio
cuando
miras a su cima,
viendo
su vuelo tan serio
temiendo
que caiga encima.
El
Ucero va sin prisa
dejando
bellos sonidos,
de
vez en cuando su brisa
quisiera
vernos perdidos.
G X Cantalapiedra.
25 – 6 – 2017.
No hay comentarios:
Publicar un comentario