ESTOY A LA MISMA ALTURA DEL MAR QUE LA SECA

ESTOY A LA MISMA ALTURA DEL MAR, QUE EN LA SECA 733, M. Viendo las grandes alturas de esta ciudad madrileña, entiendo ciertas locuras viendo a la gente risueña. Terrazas con miradores para contemplar el cielo, hipotecas y deudores que a veces buscan consuelo. Nubes que llegan deprisa, y deprisa se van yendo, la niebla deja su brisa mientras camina sonriendo. Voy viendo miles de luces que pueden mirar al suelo, y calles que tienen cruces que algunas veces dan duelo. Este Madrid de la noche que teme los fríos vientos, la gente calla el reproche si ve cerca sufrimientos. Coches que van circulando entre temidos desvelos, temes el ir aparcando en rincones agoreros. Madrid respira en la noche humos llenos de veneno, que nadie pone ese broche sabiendo que nunca es bueno. Cuando miro el horizonte Barajas tengo por centro, Madrid tiene ese resorte que la ciudad lleva dentro. La Seca vive distante sin humos que son venenos, para el Madrid arrogante no valen consejos buenos. G X Cantalapiedra.