CUANDO SE ROMPEN LOS SUEÑOS
En las frías madrugadas de la Castilla profunda,
los sueños viven andadas donde la mente es absurda.
Se rompe la madrugada con sueños desesperados,
viendo la noche marcada en signos poco agraciados.
Cuando se rompen los sueños y apenas te dicen nada,
buscas caminos risueños con una alegre alborada.
Temes seguir el camino que los sueños anhelaban,
no quieres ser adivino si a solas te despertaban.
Sientes el viento en la noche con sus silbidos profundos,
y quieres hacer reproche a sueños de vagabundos.
Buscas callar a los sueños pero parece imposible,
ellos parecen risueños en tu futuro visible.
Quieres volar sin motores y sin despegar del suelo,
olvidando sinsabores de algún triste desconsuelo.
La noche te va enseñando lo duro de su semblanza,
no quieres verte llorando en sueños sin esperanza.
Deja que pase la noche sin pensar en el mañana,
puede que pongas el broche al sonido de campana.
Cuando la noche termine y venga la madrugada,
puede ser que se ilumine una vida marginada.
Romper los sueños sin prisa y sin buscar nuevas metas,
la noche tiene esa brisa de ver muchas mentes quietas.
No maldecir al destino en los sueños trasnochados,
ni querer hilar más fino en tiempos de enamorados.
La noche siempre nos marca aunque digamos que nones.
paso a paso nos embarca en viejas embarcaciones.
Sin tener la mar delante ni sentir sus viejas olas,
los sueños van por delante en los mares de amapolas.
No puedes romper el viento ni tampoco algunos sueños.
aunque tengas mucho aliento nunca les veras pequeños.
G X Cantalapiedra.
6 – 7 - 2013
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